Aqua Mater

AQUA MATER combina la fotografía, la arquitectura y la música, y nos invita a compartir un momento de serenidad y reflexión sobre algunos de los valores fundamentales de nuestro tiempo y de nuestras sociedades, especialmente el respeto a la vida.

El agua es el bien común más importante de la humanidad. Y es probablemente el más amenazado hoy en día.

Fuente de vida y objeto de culto desde el origen del Hombre, el agua escasea cada vez más a medida que se acelera el calentamiento global. Esta situación de fragilidad se observa desde hace 30 años en todas las partes del mundo, desde el Amazonas hasta Islandia, desde el Ártico hasta el Sáhara, y se refleja en la obra de Sebastião Salgado, sin nunca llegar a volverse ansiolítica.

Imágenes fuertes, poéticas e instantáneas de la relación de hombres y animales con el elemento líquido, las 42 fotografías de Sebastião Salgado seleccionadas para la exposición AQUA MATER sólo podían tener cabida en un pabellón que es también una oda a la fragilidad del agua. El arquitecto colombiano Simón Vélez diseñó con guadua la extraordinaria arquitectura del espacio expositivo Aqua Mater. La guadua, un bambú gigante procedente de la zona más húmeda del mundo, necesita muy poca agua para crecer hasta alcanzar un tamaño increíble, respetando así el sutil equilibrio de su entorno.

Este encuentro entre la arquitectura y la fotografía en torno al agua es, en este caso, una obviedad. En su inauguración, coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Agua, AQUA MATER transmite un mensaje universal: el de la belleza y la fragilidad de un elemento vital, tan integrado en nuestras vidas que casi se vuelve invisible. Para hacerla visible de nuevo, la exposición AQUA MATER ha sido diseñada para viajar de ciudad en ciudad. Para que la voz del agua llegue más allá de nuestras fronteras.

Una experiencia sensorial y espiritual

Durante 6 meses, el parvis de La Défense acogerá la instalación artística AQUA MATER, una estructura única de bambú natural de 1.000 m2 que expone una colección única de fotografías del artista franco-brasileño Sebastião Salgado sobre el tema del agua.

Verdadera oda a la fragilidad del agua, el pabellón de guada del Amazonas ofrece un marco natural único para las fotografías de Sebastião Salgado, recordándonos lo sutil que sigue siendo el equilibrio de la naturaleza.

Como una invitación a viajar pero también a meditar, AQUA MATER ofrece una experiencia sensorial y espiritual. La iluminación tenue, la ambientación musical y sonora del compositor François-Bernard Mâche y la niebla tropical sumergen a los visitantes en una atmósfera de serenidad. Un marco privilegiado para invitarles a cuestionar y sensibilizar sobre los problemas medioambientales de hoy y de mañana.

Fonografías de la exposición de Sebastião Salgado

Los sonidos del agua siempre han sido una gran fuente de inspiración para mí. Ya en 1976, en mi espectáculo musical Da capo, en el Festival de Avignon, hice bailar a una pareja desnuda al ritmo del mar. Poco después, en Amorgos, transcribí varias grabaciones de agua y las sincronicé con una pequeña orquesta de cámara. Cuando Sebastião Salgado me pidió que acompañara su exposición, me entusiasmé. La gran admiración que siento por su talento, y mi antigua fascinación por el tema propuesto, me llevaron a aceptar de inmediato.

Sin embargo, la labor no es fácil. Es un camino estrecho entre dos imperativos: atender a las emociones de los espectadores sin convertirlos en oyentes, y al mismo tiempo organizar los sonidos para que su secuencia parezca natural y en armonía con las fuertes imágenes del fotógrafo. Además, los visitantes se desplazan a su ritmo, sin escuchar necesariamente todo, pero aceptando lo que oyen como una posible expresión de lo que están viendo.

He intentado realizar esta tarea organizando lo que desde 1960 he llamado fonografías, y después de haberlas practicado en varias ocasiones. Ni música ni documentales, estos análogos sonoros de la fotografía pueden buscar, como la fotografía, trascender la simple identificación de un tema para revelar secuelas simbólicas y poéticas, y servir de soporte a la meditación.

Es una larga epopeya acuática la que he organizado con estas «fonografías». En un vasto espacio desierto, los vientos traen poco a poco nubes de tormenta, cargadas de lluvia. Uno apenas puede distinguir una presencia humana. El flujo de agua los lleva en arroyos y ríos hasta el mar. Cerca de las costas, el agua que refluye hace que las cuevas produzcan misteriosas percusiones. Una nueva tormenta y nuevas lluvias hacen bailar las gotas y las burbujas, y luego toda esta animación se desvanece para recrear un espacio que es revelado allá arriba por el paso de un avión.

El pabellón de Simón Vélez y Stefana Simic

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El arquitecto colombiano Simón Vélez crea complejas estructuras de bambú. Su arquitectura se basa en materiales autóctonos, tomados de la naturaleza y poco transformados.

El pabellón AQUA MATER se inspira en las malocas amerindias: grandes construcciones de pilares de madera, con un techo de hojas de palma y hamacas como único mobiliario. Esta arquitectura natural única es un homenaje a este concepto ancestral en el que toda la comunidad vive en perfecto equilibrio con su entorno.

«Estos edificios son la manifestación consciente de que allí viven seres humanos, no animales salvajes, porque en el corazón de la maloca hay orden, normas, proporciones geométricas, cosmología y astronomía. Y sobre todo, hay espiritualidad: son espacios místicos».

El pabellón está diseñado con bambú guadua del Amazonas, el recurso forestal renovable más abundante en Colombia. La guadua es más fuerte que el acero, puede generar más biomasa que cualquier otro cultivo y tiene una capacidad única para absorber el CO2 de la atmósfera y producir oxígeno.

Con este sencillo descubrimiento, el bambú se convierte en una verdadera «planta de acero», que permite construir estructuras tan grandes o más que las que se pueden hacer convencionalmente con madera o de acero.

«Realmente es la primera vez que diseñamos una instalación de estas características y nos ha abierto nuevas posibilidades constructivas y arquitectónicas. Poder hacer un proyecto así con un material tan humilde como el bambú de guadua, con tal rapidez de producción y montaje y a bajo coste, es un ejemplo de lo extraordinario que es trabajar con la naturaleza.» Simón Vélez y Stefana Simic

Las fotografías de Sebastião Salgado

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El agua es fundamental en la obra de Sebastião Salgado. La Amazonia, Islandia, el Ártico…

A lo largo de su exhaustiva búsqueda de los pueblos y paisajes originarios, pero también a través de su compromiso medioambiental en su tierra natal en Brasil, Salgado ha estado en contacto con todas las expresiones del agua durante treinta años, y ha experimentado todas sus fragilidades.

«Los relatos míticos y la imaginación poética suelen asociar el agua con el ciclo vital humano. El agua es el líquido más precioso de la Tierra, indispensable para nuestra existencia. El origen de esta exposición es una reflexión sobre el estado de nuestro planeta. El calentamiento global se ha convertido en una amenaza para la humanidad y para la naturaleza.

El deshielo de los glaciares y la expansión térmica de las aguas del mar debido a las altas temperaturas están provocando inexorablemente una subida del nivel del mar, con consecuencias devastadoras para las poblaciones costeras y el medio ambiente. La cohabitación armoniosa con el elemento acuático y su protección son más necesarias que nunca para nuestra supervivencia y la preservación de la biodiversidad en todo el mundo.

Los bosques producen el fenómeno de la evaporación, formando verdaderos ríos aéreos, transportando agua dulce a diferentes latitudes, lo que reafirma la urgencia de su protección. Los océanos, los glaciares, los ríos, los arroyos, los lagos, las cascadas y la lluvia son una parte importante del planeta. El agua es vital para el cuerpo humano, para las plantas que nos alimentan, para los biomas y las especies animales.

Intentar representar en imágenes la necesidad, la belleza, la fuerza y los misterios del agua es una tarea difícil, pues se corre el riesgo de caer fácilmente en el lugar común. En esta exposición, el agua aparece en todas sus formas, su pureza y su intensidad, su abundancia y su escasez, captada en su soledad o en diversas interacciones con el hombre, la fauna y la flora, en una muestra fotográfica de su carácter poético así como de su condición de indispensable.

Como escribió el pensador francés Gaston Bachelard en su obra El agua y los sueños: «Una gota de agua poderosa basta para crear un mundo y disolver la noche. Para soñar con el poder, todo lo que se necesita es una gota imaginada en profundidad. El agua así dinamizada es un germen; da a la vida un impulso inagotable. Sebastião Salgado y Lélia Wanick Salgado