CUBA. Tatuare la Storia
El PAC – Padiglione d’Arte Contemporanea de Milán, presenta Cuba. Tatuare la Storia, una exposición que, por primera vez por iniciativa de un espacio público en Italia, ofrece una reflexión orgánica y en profundidad sobre el arte contemporáneo cubano, tanto de dentro como de fuera de la isla, con el objetivo de trazar las directrices necesarias para lograr una correcta comprensión y conocimiento del país.
La exposición está comisariada por Diego Sileo, comisario del PAC, y Giacomo Zaza, comisario del pabellón de Cuba de las dos últimas Bienales de Venecia, y comisario asociado de la 12ª Bienal de La Habana. El proyecto también se extiende a la ciudad de Milán con dos instalaciones: una en el MUDEC – Museo delle Culture, y la segunda en Edicola Radetzky en Viale Gorizia (Darsena).
Con esta exposición el PAC continúa con su línea de exploración de otros continentes a través del arte contemporáneo, que inició el verano pasado con la exposición Art in China, que continúa este año con esta muestra dedicada al arte cubano y que proseguirá con al menos dos grandes exposiciones más, una sobre África en 2017 y otra sobre la escena artística brasileña en 2018.
Esta exposición compleja y ambiciosa se despliega en ocho secciones, todas ellas estrechamente relacionadas entre sí: una parte histórica que muestra el lado performativo del arte cubano contemporáneo; con una amplia selección de obras e instalaciones, algunas de las cuales han sido producidas especialmente para el PAC por algunos de los artistas cubanos más representativos y los nombres más prometedores de la nueva generación; encontramos una sala dedicada por entero a Lázaro Saavedra, ganador del Premio Nacional de Artes Plásticas 2014; un homenaje a los dos artistas cubanos más influyentes de la escena internacional del arte, Ana Mendieta y Félix González-Torres; y con la participación excepcional de Tania Bruguera con una nueva obra.
Lo que sobresale de este proyecto son los temas que emergen de las obras presentadas; la tensión entre ideologías, la subjetividad del artista, la realidad social, la hibridación, el uso del cuerpo como instrumento de resistencia, la confiscación de la intimidad así como las relaciones entre el ámbito doméstico y el espacio público.
El objetivo de Cuba. Tatuare la Storia no es crear un comentario historicista sobre el arte cubano contemporáneo sino restablecer una galaxia descentralizada de talentos y experiencias artísticas para el intercambio, la deconstrucción y la re-edición de la identidad. Mediante el uso de fragmentos, momentos condensados y sin terminar, la exposición se aleja de las limitaciones de una visión cerrada y lineal, para en su lugar apuntar hacia un espacio contínuo y permeable. Sobre la base del análisis antropológico y social, la acción crítica y la especulación reflexiva, la intervención pública y el documento etnográfico, las obras seleccionadas arrojan luz sobre la verdad y las ilusiones del mundo cubano, su aislamiento, haciéndose eco también de las voces de la comunidad cubana fuera las fronteras.
Cada artista exhibido en PAC vuelve a contar, a través de sus obras, las etapas en un viaje hacia el entorno antropológico y ontológico de la isla, con su magnificencia y su pobreza, su ruido y su furor, sus caras culturales, lingüísticas y míticas, sus corrientes ideológicas y su ceguera etnocéntrica.
Texto procedente del dossier de prensa de la exposición, traducido al español por Cristina Blanco.
Enlaces de interés:
- CUBA. Tatuare la Storia en la página web del PAC
- Blog dedicado a la exposición