Stefan Brüggemann. To Be Political It Has To Be Nice
El CGAC acoge la exposición «To Be Political It Has To Look Nice» del artista mexicano Stefan Brüggemann. La muestra, está construida a partir de intervenciones espaciales e instalaciones que cuestionan el orden de los conceptos, la lógica de las normas y, particularmente, las convenciones del lenguaje y del sistema artístico.
La exposición toma como título una de las frases recopiladas por el artista en un archivo de títulos posibles, Showtitles (2000-2016), obra también presente en la muestra, que constituye precisamente una crítica a las convenciones del arte político, cada vez más sometido al servicio de la corrección ideológica.
En la primera sala de la exposición las paredes que circundan el espacio vacío han sido empapeladas con una diminuta frase —Conceptual Decoration (2008-2016)—, casi una contradicción, un oxímoron, que abre (eso sí, sin abordarlo propiamente) uno de los debates cruciales del arte actual: la fricción entre un arte de ideas, conceptos y propuestas de acción y un arte de la pintura al que se señala como responsable de lo decorativo. Conceptual Decoration es una autodefinición de la obra, una descripción, pero señala también los modos y las actitudes decorativas que ha asumido hoy el arte conceptual.
En las mesas invertidas que creó Álvaro Siza para ocultar la iluminación en el techo de las salas de la primera planta del CGAC, y recorriendo todo el espacio de la exposición, se despliega Monuments for the Ceiling I-X (2010), constituida por una serie de réplicas no exactas o inventadas de piezas de Dan Flavin construidas con fluorescentes.
Timeless (2016) es una pieza monumental: un gran muro de espejos sobre los que el artista ha intervenido con grafiti y pintura blanca. Una pared lujosa donde se ha volcado el gesto extremo de la rebeldía. Fusión y fricción entre la representación del lujo y, más que la voluntad, el gesto de ultrajar.
En esa misma dirección actúa Trash Mirror Boxes (After MV) (2015) una obra que consiste en 44 cajas recubiertas por espejo en todas sus caras y sobre las que está serigrafiado el término inglés «trash» que significa basura. Las pinturas pertenecientes a la serie Joke and Definition Paintings (2011) marcan un contrapunto con respecto a sus Text Pieces, frases en vinilo que organizan un espacio gráfico. Una extensa escenografía de un mundo, el nuestro, obsesionado por la palabra.
La obra de Stefan Brüggemann está fuertemente enraizada en las prácticas posconceptuales de finales de los sesenta y principios de los setenta. Siempre desde el punto de vista crítico, a veces irónico, su práctica artística cuestiona tanto el mundo que nos rodea como las categorizaciones estéticas tradiconales. Su intención nunca es generar certezas, sino comparar al espectador consigo mismo y hacer que este se plantee preguntas.
Comisario: Santiago Olmo.
Texto procedente del dossier de prensa de la exposición.
Enlaces de Interés:
- Página web del artista.
- Archivo Show Titles. Proyecto del artista en el que archiva títulos de exposiciones.
- Centro Galego da Arte Contemporánea