Iñaki Bonillas. El triunfo de la vida solitaria

Las referencias a la figura del célebre arquitecto mexicano Luis Barragán han sido recurrentes en la obra del artista mexicano Iñaki Bonillas (Ciudad de México, 1981). La primera vez que Bonillas se refirió a Barragán fue en el año 2003, con motivo de su participación en la exposición El aire es azul, comisariada por Hans-Ulrich Obrist y realizada en la Casa Luis Barragán, estudio y vivienda del propio arquitecto. Dos años más tarde, el rastro de Barragán aparecía en Barcelona de manos de Bonillas en la que fue su Intervención al Pabellón de Mies van der Rohe. Sin alterar en absoluto la arquitectura del emblemático edificio barcelonés, Bonillas envolvió sutilmente de color “rosa Barragán” el minimalismo del icónico arquitecto alemán.

En 2016, Bonillas regresa a la Casa Barragán para desarrollar un nuevo proyecto expositivo: Secretos. En esta ocasión, el artista se centró en los espacios negativos de la casa, aquellos lugares que no están a la vista cuando el visitante recorre el interior del edificio. Todo lo que queda detrás de puertas y cortinas, dentro de cajones y armarios. El punto de partida de este ejercicio surgió de constatar que, por su naturaleza destilada, en la arquitectura de Barragán, pero especialmente en la que fue su casa, hay un claro intento por mantener oculto todo lo que pueda perturbar la armonía y la poética de sus planteamientos arquitectónicos: la acumulación de objetos, papeles, cosas inservibles; en pocas palabras, el desorden propio de la vida cotidiana. El proyecto de Bonillas se concibió, entonces, como una meditación más amplia en torno a la necesidad humana de mantener ocultos no sólo ciertos objetos, sino emociones, pensamientos, confidencias, recuerdos y, en suma, toda clase de secretos, que nos esforzamos por mantener en la sombra. Así, a través de una serie de propuestas artísticas, Bonillas buscó ahondar en el universo de los “secretos”, de un modo más figurativo que literal.

El triunfo de la vida solitaria, quinta exposición de Bonillas en ProjecteSD, muestra por primera vez en nuestro país parte de las obras presentadas en o surgidas posteriormente del proyecto Secretos en la Casa Luis Barragán. Todas las piezas expuestas resultan de la lectura por parte de Bonillas de una topografía íntima, de tomar el “inconsciente” de la casa de Barragán como una especie de archivo para extraer del mismo, con su habitual sensibilidad y agudeza estética y conceptual, siete obras, entre enigmáticas y poéticas; siete fragmentos de su discurrir por el espacio y la vida ocultos de Luis Barragán.

La exposición inicia con Linterna mágica. Bonillas se dedicó a recorrer la Casa Barragán a oscuras, con la única luz de una linterna, buscando objetos, detalles arquitectónicos, rincones ocultos. El resultado es una colección de imágenes casi fantasmagóricas que relatan una historia ciertamente ominosa, a través de una constelación de objetos que resultan familiares, pero que se presentan de una manera inquietante. Bonillas se inspiró para realizar esta pieza en la película de Fritz Lang, El secreto detrás de la puerta. La obra se proyecta sobre una estructura de cedro, en una clara referencia al mobiliario de la Casa Barragán.

La oscuridad y tratamiento intimista de dicha obra, situada en un espacio de transición, contrasta con el cromatismo de la mayoría de obras presentadas en la sala principal. Coloristas, pero no menos enigmáticas. Bonillas sigue con su exploración minuciosa de lo escondido, a través de varias series fotográficas cuyo motivo, podríamos decir, se centra en detalles “peri-arquitectónicos” del interior de la Casa Barragán. Huellas registra las depresiones, marcas y desvanecimientos que los muebles de la casa han dejado sobre las viejas alfombras. Una especie de recapitulación del recorrido por la casa, a la vez que un registro cromático de sus estancias, a modo de emblemas jeroglíficos que recuerdan a estudios de abstracciones geométricas Albersescos (Barragán admiraba la obra de Josef Albers, a quien conocía y con quien compartía afinidades artísticas). Interesante la comparación que realiza Tom McDonough* de esta obra con la película Darmstädter Werkblock (2007), de Tacita Dean, y los fotograbados asociados a ella, que registran las irregularidades y parches de las paredes de yute sobre las cuales Joseph Beuys instaló sus obras para la sala “Block Beuys” en el Hessisches Landesmuseum, capturada por Dean justo antes de su controvertido desmontaje y reemplazo.

De los rastros más interiores y ocultos pasamos a dos series en las que Bonillas experimenta fotográficamente con varios de los objetos encontrados entre los escasos elementos decorativos de la casa. En Inversiones, Bonillas trabaja con un jarrón de cristal esférico que se mantiene siempre lleno de agua. Cautivado por el efecto óptico de inversión que se produce al mirar a través de la superficie esférica transparente y llena de líquido, Bonillas realiza tres fotografías del objeto situado en tres espacios distintos de la casa, siempre delante de una entrada de luz. El resultado se procesa como imagen invertida, es decir la del negativo en color, aquella imagen que existe pero que queda oculta en toda fotografía. El juego de transparencias que unen el interior con el exterior forma un interesante efecto pictórico en el que, curiosamente, resurge el icónico color rosado de la arquitectura de Barragán. Esta relación y diálogo entre el interior y el exterior, propios de la arquitectura de Barragán se plasma de nuevo en la obra Jardín. La pieza toma como referencia otro objeto, un extraño prisma reflectante encontrado en una de las estancias de la casa. En una serie de cuatro imágenes Bonillas fotografía el prisma en el jardín de la casa, insertando un juego óptico de variaciones de foco, que resulta en la sobreimposición de los elementos. La calidad reflectante del objeto y el verde intenso de la vegetación se enlazan  íntimamente de forma que se convierten en una sola entidad.

En uno de los múltiples clósets de Casa Barragán se encontraron una buena cantidad de textiles almacenados. Parecería que Barragán hubiese querido cubrirlo todo con ellos, apostar por la media luz. En la serie Telas, de la cual se presenta una pieza en esta exposición, Bonillas se propone continuar con ese ánimo de ocultamiento, silenciando esta vez algunas de las vistas más fotogénicas del siglo XX, sujetando distintos pedazos de tela frente a la cámara fotográfica, intentando, únicamente, dejar pasar la vista del fotógrafo por pequeños espacios, revelando, así, sólo algunos fragmentos, sólo algunos detalles, de la arquitectura de la casa. En este caso, se trata de la fachada legendaria de la calle General Francisco Ramírez, número 14. De este modo, la entrada a la casa del arquitecto queda oculta y, como corresponde, secreta.

La imagen El triunfo de la vida solitaria surge a partir de un grabado del siglo XVI del pintor y dibujante flamenco Maarten de Vos. Bonillas encontró en el archivo personal de Barragán una carpeta con dos fotografías del grabado y, tal y como las encontró, las fotografió, para más adelante preparar la composición que aquí vemos. El grabado muestra una columna en posición central con dos figuras religiosas a los lados. La columna es precisamente el único elemento que está ausente en la arquitectura de la Casa Barragán. Esta pieza es una alusión a la figura y obra de Luis Barragán, situado entre el ascetismo y la sensualidad, creador de espacios serenos, pero por cuya vida deambularon fantasmas inquietantes. Una figura solitaria tal y como se nos muestra en Crucigrama #9. Un collage realizado a partir de una fotografía del archivo personal de Barragán, en el que vemos una figura, a lo lejos, en un paisaje abierto, llano, vacío. Yuxtapuestos a esta imagen, y construidos utilizando la cuadrícula de un crucigrama, Bonillas inserta unos fragmentos de una textura azulada, como un velo entre luz y penumbra. La figura es Luis Barragán, el arquitecto contemplativo, en silencio.

Texto procedente del dossier de prensa de la exposición.

Imágenes:

Enlaces de interés:

  • Más información sobre Iñaki Bonillas en la web de ProjecteSD